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Consejos de defensa personal: Cómo evitar y escapar de una agresión:

Introducción

En este artículo te voy a enseñar cómo evitar y escapar de una agresión, aplicando algunos consejos de defensa personal. La defensa personal es el conjunto de habilidades y técnicas que te permiten protegerte de una amenaza física o verbal, pero lo mejor es no tener que usarla. Por eso, lo primero que debes saber es cómo prevenir una situación de riesgo, cómo actuar si te encuentras con un agresor y cómo liberarte si te agarra o te ataca. Estos consejos te pueden servir tanto si eres hombre como si eres mujer, aunque las mujeres suelen ser más vulnerables a ciertos tipos de agresión. Recuerda que la defensa personal no es solo saber golpear o bloquear, sino también tener una actitud y una mentalidad adecuadas para afrontar el conflicto.

Evitar la defensa personal es la mejor opción

Antes de entrar en materia, quiero dejar claro que el objetivo de este artículo no es enseñarte a pelear, sino a evitarlo. La defensa personal no es un deporte ni un juego, sino una necesidad en casos extremos. Por eso, siempre que puedas, debes evitar la violencia y buscar una solución pacífica al problema. La defensa personal solo debe usarse como último recurso, cuando no hay otra opción y tu vida o tu integridad física están en peligro. No se trata de demostrar tu valentía o tu orgullo, sino de salvaguardar tu seguridad y la de los tuyos. Por eso, el primer consejo que te doy es: evita la defensa personal siempre que puedas.

Llevar el móvil cargado y dar instrucciones a nuestro acompañante de lo que debe de hacer en caso de que le avises, por ejemplo, correr a un lugar seguro

Una forma de evitar la defensa personal es estar preparado y prevenido. Si vas a salir a la calle, especialmente si vas solo o por zonas poco concurridas o peligrosas, debes llevar siempre el móvil cargado y con saldo. El móvil puede ser tu mejor aliado en caso de emergencia, ya que te permite llamar a la policía, a un familiar o a un amigo para pedir ayuda o avisar de tu situación. También puedes usarlo para grabar o fotografiar al agresor o al lugar del incidente, lo que puede servir como prueba o como identificación posterior. Además, si vas acompañado, debes dar instrucciones claras a tu acompañante de lo que debe hacer en caso de que te avise o te vea en apuros. Por ejemplo, puedes decirle que corra a un lugar seguro, que llame al 112 o que busque ayuda de otras personas. Así podrás contar con su apoyo y evitar que se ponga en riesgo innecesariamente.

Escenario de la defensa personal, evita ir por calles oscuras o poco transitadas, valora cada entorno antes de llegar

Otra forma de evitar la defensa personal es elegir bien el escenario por el que te mueves. No es lo mismo caminar por una calle iluminada y concurrida que por un callejón oscuro y solitario. El sentido común te dice que debes evitar las zonas donde hay más probabilidades de encontrarte con un agresor o donde tengas menos posibilidades de escapar o pedir ayuda. Por eso, debes planificar tu ruta con antelación y valorar cada entorno antes de llegar. Si ves algo sospechoso o te sientes incómodo, cambia de dirección o busca una alternativa más segura. No te arriesgues innecesariamente ni confíes en la suerte.

Posibles compinches del agresor a ayuda externa de personas y armas ocultas

Un aspecto importante que debes tener en cuenta al valorar el escenario es la posible presencia de compinches del agresor. A veces, el agresor no actúa solo, sino que cuenta con la colaboración o el apoyo de otras personas que pueden estar ocultas o disimuladas en el entorno. Estos compinches pueden intervenir en el momento más inesperado para ayudar al agresor, para impedir tu huida o para atacarte por sorpresa. Por eso, debes estar atento a los movimientos y las miradas de las personas que te rodean y no fiarte de nadie. También debes tener en cuenta que el agresor puede llevar armas ocultas, como cuchillos, navajas, pistolas, etc. Estas armas pueden aumentar el peligro y la gravedad de la agresión, por lo que debes evitar el contacto físico con el agresor y mantener una distancia prudencial.

Posibles lugares de refugio ante un evento de defensa personal

Una vez que has valorado el escenario, debes identificar los posibles lugares de refugio a los que puedas acudir en caso de que se produzca una agresión. Estos lugares pueden ser comercios, bares, restaurantes, gasolineras, comisarías, hospitales, etc. Lo importante es que sean lugares donde haya gente, donde puedas pedir ayuda o donde puedas protegerte del agresor. También puedes buscar lugares donde haya cámaras de seguridad, alarmas o teléfonos públicos. Estos lugares pueden disuadir al agresor o facilitar tu rescate. Debes memorizar estos lugares y tenerlos en cuenta a la hora de planificar tu ruta o tu huida.

Armas de fortuna en la defensa personal, valorar las que hay en el entorno o llevamos, qué son y su potencial

A pesar de todas las precauciones que tomes, puede darse el caso de que te encuentres con un agresor y tengas que defenderte. En ese momento, puedes recurrir a las armas de fortuna, es decir, a los objetos que tengas a mano o que encuentres en el entorno y que puedas usar para defenderte o para atacar al agresor. Estas armas pueden ser muy variadas y dependen de la situación y de la imaginación. Algunos ejemplos son: llaves, bolígrafos, paraguas, botellas, piedras, palos, etc. Estas armas pueden servir para golpear, cortar, pinchar o lanzar al agresor, causándole dolor o distracción y dándote una ventaja o una oportunidad para escapar. Sin embargo, debes valorar bien el uso de estas armas, ya que también pueden tener inconvenientes o riesgos. Por ejemplo: pueden fallar, romperse o perderse; pueden provocar una reacción violenta del agresor; pueden ser usadas en tu contra; pueden causar daños excesivos o innecesarios; pueden implicarte legalmente; etc. Por eso, debes usar las armas de fortuna con criterio y responsabilidad.

Qué son las armas de fortuna y cómo usarlas

Las armas de fortuna son objetos cotidianos que puedes usar como armas improvisadas en una situación de defensa personal. Estos objetos pueden ser los que llevas encima o los que encuentras en el entorno. Lo importante es que sepas identificarlos y aprovecharlos para tu beneficio. Para usar las armas de fortuna debes seguir estos pasos:

  • Observa el entorno y busca objetos que puedan servirte como arma. Pueden ser objetos duros, afilados, punzantes o pesados.
  • Elije el objeto más adecuado según la distancia, el tamaño y el tipo de agresor. No todos los objetos sirven para todas las situaciones.
  • Toma el objeto con firmeza y seguridad. No lo muestres ni lo amenaces con él. Úsalo solo cuando sea necesario.
  • Apunta al objetivo con precisión y rapidez. El objetivo debe ser una parte sensible o vulnerable del agresor.
  • Golpea con fuerza y decisión. No dudes ni te arrepientas. El golpe debe ser efectivo y contundente.
  • Aprovecha el efecto del golpe para escapar o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.
  • Despréndete del objeto cuando ya no lo necesites o cuando pueda perjudicarte. No te encariñes ni te apegues al objeto.

El efecto túnel

El efecto túnel es un fenómeno psicológico que se produce en situaciones de estrés o de peligro, como puede ser una agresión. Consiste en que la atención se centra en un solo punto o elemento, ignorando o desatendiendo el resto de la información disponible. El efecto túnel puede tener ventajas y desventajas en una situación de defensa personal. Por un lado, puede ayudar a concentrarse en el objetivo y a actuar con rapidez y determinación. Por otro lado, puede impedir ver el panorama completo y anticipar las consecuencias o los riesgos.

Cómo aprovechar el efecto túnel

Para aprovechar el efecto túnel debes seguir estos consejos:

  • Usa el efecto túnel para focalizar tu atención en el agresor y en tu plan de acción. No te distraigas con otros estímulos ni con pensamientos negativos.
  • Usa el efecto túnel para aumentar tu confianza y tu motivación. Piensa que eres capaz de defenderte y de escapar. No te rindas ni te des por vencido.
  • Usa el efecto túnel para potenciar tu adrenalina y tu energía. Aprovecha el impulso que te da el estrés para actuar con fuerza y velocidad. No te paralices ni te bloquees.

Cómo evitar el efecto túnel

Para evitar el efecto túnel debes seguir estos consejos:

  • No pierdas de vista el entorno y los posibles cambios. Fíjate si hay más agresores, armas, obstáculos, salidas, etc. Adapta tu estrategia según las circunstancias.
  • No olvides las consecuencias de tus acciones. Piensa en las posibles reacciones del agresor, en los daños que puedes causar o sufrir, en las implicaciones legales, etc. Actúa con criterio y responsabilidad.
  • No descuides tu respiración y tu ritmo cardíaco. Respira profundamente y con regularidad para oxigenar tu cerebro y tu cuerpo. Controla tu pulso para no acelerarte ni agotarte.

Advertencias verbales en defensa personal, antes de nada

Las advertencias verbales son las palabras o expresiones que usas para comunicarte con el agresor en una situación de defensa personal. Las advertencias verbales pueden tener varios objetivos, como por ejemplo:

  • Disuadir al agresor de su intención. Puedes intentar convencer al agresor de que no te ataque, de que no vale la pena, de que se arrepentirá, etc.
  • Negociar con el agresor una solución pacífica. Puedes intentar llegar a un acuerdo con el agresor, ofrecerle algo a cambio, pedirle tiempo, etc.
  • Avisar al agresor de tus intenciones. Puedes advertir al agresor de que estás dispuesto a defenderte, de que sabes defensa personal, de que tienes un arma, etc.
  • Alertar a otras personas de la situación. Puedes pedir ayuda a gritos, llamar la atención de los transeúntes, avisar a la policía, etc.

Las advertencias verbales pueden ser muy útiles en una situación de defensa personal, ya que pueden evitar o reducir la violencia, ganar tiempo o conseguir apoyo. Sin embargo, también pueden tener inconvenientes o riesgos, como por ejemplo: pueden irritar o enfurecer al agresor; pueden revelar información o debilidades; pueden ser ignoradas o desoídas; pueden ser falsas o incoherentes; etc. Por eso, debes usar las advertencias verbales con cuidado y criterio.

Cómo usar las advertencias verbales

Para usar las advertencias verbales debes seguir estos consejos:

  • Usa un tono firme pero tranquilo. No grites ni susurres. No te muestres agresivo ni sumiso. No insultes ni amenaces al agresor.
  • Usa un lenguaje claro y directo. No uses palabras rebuscadas ni ambiguas. No te enrolles ni te contradigas. No mientas ni exageres.
  • Usa un lenguaje adecuado al contexto y al agresor. No uses palabras que puedan ofender o herir al agresor por su sexo, edad, raza, religión, etc. No uses palabras que puedan ser malinterpretadas o que tengan doble sentido.
  • Usa un lenguaje coherente con tu postura gestual y tu actitud. No digas una cosa y hagas otra. No digas una cosa y pienses otra. No digas una cosa y sientas otra.

Ejemplos de advertencias verbales

A continuación te muestro algunos ejemplos de advertencias verbales según el objetivo que se persiga:

Objetivo Advertencia verbal
Disuadir al agresor de su intención «No te conviene hacer eso. Te vas a meter en un lío. Piénsalo bien antes de actuar».
Negociar con el agresor una solución pacífica «Vamos a calmarnos y a hablar. Seguro que podemos llegar a un acuerdo. Dime qué quieres y veremos qué podemos hacer».
Avisar al agresor de tus intenciones «No quiero pelear contigo, pero si me atacas me voy a defender. Sé defensa personal y no me voy a dejar hacer daño».
Alertar a otras personas de la situación «¡Socorro! ¡Me están atacando! ¡Llamen a la policía! ¡Ayúdenme por favor!»

Postura de defensa con manos elevadas y un pie adelante

Si no has podido evitar la agresión y tienes que defenderte, debes adoptar una postura de defensa que te permita protegerte y reaccionar ante el ataque. La postura de defensa con manos elevadas y un pie adelante es una de las más básicas y efectivas en una situación de defensa personal. Consiste en colocar tu cuerpo ligeramente de lado, con un pie adelantado y otro retrasado, y levantar las manos a la altura del pecho, con las palmas hacia fuera. Esta postura tiene varias ventajas, como por ejemplo:

  • Te da más estabilidad y movilidad, ya que puedes desplazarte hacia delante, hacia atrás o hacia los lados con facilidad.
  • Te permite proteger tu cara y tu cuello, que son las partes más sensibles y vulnerables de tu cuerpo.
  • Te permite bloquear o golpear con ambas manos, ya sea con las palmas, los puños o los dedos.
  • Te permite usar las piernas para patear o para huir si es necesario.
  • Te permite disimular tu intención de defenderte o de atacar, ya que parece una postura natural y no agresiva.

Cómo adoptar la postura de defensa con manos elevadas y un pie adelante

Para adoptar la postura de defensa con manos elevadas y un pie adelante debes seguir estos pasos:

  • Gira tu cuerpo ligeramente hacia el lado contrario al que escribes. Si eres diestro, gira hacia la izquierda; si eres zurdo, gira hacia la derecha.
  • Adelanta el pie del mismo lado que escribes y retrasa el otro pie. Si eres diestro, adelanta el pie derecho; si eres zurdo, adelanta el pie izquierdo.
  • Separa los pies a la anchura de los hombros y flexiona ligeramente las rodillas. Esto te dará más equilibrio y amortiguación.
  • Levanta las manos a la altura del pecho y separa los dedos. Coloca las palmas hacia fuera y los codos hacia dentro. Esto te permitirá proteger tu cara y tu cuello, y prepararte para bloquear o golpear.
  • Mira al agresor a los ojos, pero sin fijarte demasiado. Esto te permitirá estar atento a sus movimientos y a sus intenciones, y transmitirle confianza y respeto.
  • Respira profundamente y con regularidad. Esto te permitirá relajar tu cuerpo y tu mente, y oxigenar tus músculos y tu cerebro.

Qué es la distancia de seguridad y cómo mantenerla

La distancia de seguridad es el espacio que debes mantener entre tú y el agresor en una situación de defensa personal. La distancia de seguridad te permite tener tiempo para reaccionar ante un ataque, evitar el contacto físico con el agresor y preparar tu defensa o tu huida. La distancia de seguridad depende de varios factores, como el tamaño, la velocidad y el alcance del agresor, el tipo de arma que usa o que llevas, el entorno en el que te encuentras, etc. No hay una medida exacta para la distancia de seguridad, pero se suele estimar entre 1 y 2 metros.

El posible agresor querrá entrar en tu distancia de seguridad con alguna llamada de atención, ejemplo, si dice: «Oye, ¿sabes qué hora es? Es que se me ha roto el reloj y tengo una cita importante».
Tú le respondes: «No lo sé, lo siento. No llevo reloj ni móvil». Y sigues tu camino sin distraerte ni sacar ningún objeto de valor.

Cómo medir la distancia de seguridad

Para medir la distancia de seguridad debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su altura, su peso, su complexión, su forma de moverse, etc. Esto te dará una idea de su potencia y su rapidez.
  • Observa el arma que usa el agresor o que llevas tú. Puede ser un arma blanca, un arma de fuego, un objeto contundente, etc. Esto te dará una idea de su alcance y su peligrosidad.
  • Observa el entorno en el que te encuentras. Puede ser un espacio abierto o cerrado, con obstáculos o sin ellos, con salidas o sin ellas, etc. Esto te dará una idea de tu movilidad y tus opciones.
  • Estima la distancia que hay entre tú y el agresor. Puedes usar como referencia tu brazo extendido, tu pierna extendida, tu paso normal, etc. Esto te dará una medida aproximada de la distancia.
  • Ajusta la distancia según los factores anteriores. Si el agresor es grande, rápido o tiene un arma larga o peligrosa, aumenta la distancia. Si el entorno es estrecho, con obstáculos o sin salidas, reduce la distancia.

Cómo mantener la distancia de seguridad

Para mantener la distancia de seguridad debes seguir estos consejos:

  • No pierdas de vista al agresor ni le des la espalda. Esto te permitirá anticiparte a sus movimientos y reaccionar a tiempo.
  • No te quedes quieto ni te muevas al azar. Desplázate con pasos cortos y rápidos, cambiando de dirección y de ritmo. Esto te permitirá controlar el espacio y sorprender al agresor.
  • No te acerques ni te alejes demasiado del agresor. Si te acercas demasiado, te expones a su ataque. Si te alejas demasiado, le das ventaja o le invitas a perseguirte.
  • No te pongas en una posición desfavorable o peligrosa. Evita quedar acorralado, rodeado, en inferioridad, etc. Busca una posición ventajosa o segura.

Qué son las distancias de lucha y cuál nos interesa

Las distancias de lucha son los rangos de espacio que se establecen entre tú y el agresor en una situación de defensa personal. Las distancias de lucha determinan el tipo de ataque o de defensa que se puede usar en cada momento, así como las ventajas y los inconvenientes que se pueden tener. Hay cuatro distancias de lucha principales, que son:

  • Distancia larga. Es la distancia que hay cuando no se puede alcanzar al agresor ni con las manos ni con los pies. En esta distancia se puede usar armas de fuego, armas arrojadizas o proyectiles.
  • Distancia media. Es la distancia que hay cuando se puede alcanzar al agresor con los pies o con las manos extendidas. En esta distancia se puede usar patadas, puñetazos, armas blancas o armas contundentes.
  • Distancia corta. Es la distancia que hay cuando se puede alcanzar al agresor con los codos, las rodillas o la cabeza. En esta distancia se puede usar codazos, rodillazos, cabezazos, mordiscos o estrangulamientos.
  • Distancia de agarre. Es la distancia que hay cuando se está en contacto directo con el agresor y se puede agarrar o ser agarrado. En esta distancia se puede usar llaves, proyecciones, luxaciones o inmovilizaciones.

La distancia de lucha que nos interesa depende de varios factores, como el tamaño, la fuerza y el alcance del agresor, el tipo de arma que usa o que llevamos, el entorno en el que nos encontramos, etc. No hay una distancia de lucha ideal para todas las situaciones, pero se suele preferir la distancia media, ya que permite mantener una distancia de seguridad y usar técnicas simples y efectivas.

Cómo medir las distancias de lucha

Para medir las distancias de lucha debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su altura, su peso, su complexión, su forma de moverse, etc. Esto te dará una idea de su potencia y su rapidez.
  • Observa el arma que usa el agresor o que llevas tú. Puede ser un arma blanca, un arma de fuego, un objeto contundente, etc. Esto te dará una idea de su alcance y su peligrosidad.
  • Observa el entorno en el que te encuentras. Puede ser un espacio abierto o cerrado, con obstáculos o sin ellos, con salidas o sin ellas, etc. Esto te dará una idea de tu movilidad y tus opciones.
  • Estima la distancia que hay entre tú y el agresor. Puedes usar como referencia tu brazo extendido, tu pierna extendida, tu paso normal, etc. Esto te dará una medida aproximada de la distancia.
  • Compara la distancia con los rangos de las distancias de lucha. Puedes usar como referencia tu mano abierta (distancia larga), tu puño cerrado (distancia media), tu codo doblado (distancia corta) o tu mano agarrada (distancia de agarre).

Cómo cambiar las distancias de lucha

Para cambiar las distancias de lucha debes seguir estos consejos:

  • Elije la distancia de lucha que más te convenga según los factores anteriores. Si el agresor es grande, rápido o tiene un arma larga o peligrosa, elige la distancia larga o media. Si el entorno es estrecho, con obstáculos o sin salidas, elige la distancia corta o de agarre.
  • Mantén o modifica la distancia de lucha según tu plan de acción. Si quieres evitar o escapar
    de la agresión, mantén la distancia larga o media. Si quieres defenderte o atacar al agresor, reduce la distancia corta o de agarre.
  • Usa las técnicas adecuadas para cada distancia de lucha. No uses las mismas técnicas para todas las distancias. Adapta tu repertorio según el rango de espacio que tengas.
  • Anticípate a los cambios de distancia del agresor. No esperes a que el agresor cambie la distancia de lucha a su favor. Sé el primero en tomar la iniciativa y sorprender al agresor.

Expulsión del agresor si entra en nuestra distancia de seguridad

Si el agresor logra entrar en tu distancia de seguridad y te amenaza o te ataca, debes actuar con rapidez y decisión para expulsarlo de tu espacio y recuperar tu ventaja. La expulsión del agresor consiste en usar una técnica de defensa personal que le cause dolor, daño o distracción, y que te permita alejarlo de ti o crear una oportunidad para escapar o contraatacar. La expulsión del agresor puede ser de varios tipos, como por ejemplo:

  • Empujar al agresor con las manos, los brazos o el cuerpo. Esto puede hacerle perder el equilibrio o la posición.
  • Golpear al agresor con las manos, los pies, los codos, las rodillas o la cabeza. Esto puede hacerle sangrar, romperle un hueso o dejarle inconsciente.
  • Pellizcar, arañar, morder o tirar del pelo al agresor. Esto puede hacerle soltar un arma, un agarre o una prenda.
  • Presionar, torcer o golpear un punto sensible o vulnerable del agresor. Esto puede hacerle sentir un dolor intenso o una sensación desagradable.

La expulsión del agresor debe ser rápida, contundente y efectiva. No debes dudar ni titubear en tu acción. No debes tener piedad ni compasión con el agresor. No debes quedarte paralizado ni esperar su reacción.

Cómo expulsar al agresor si entra en tu distancia de seguridad

Para expulsar al agresor si entra en tu distancia de seguridad debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su posición, su movimiento, su arma, su intención, etc. Esto te permitirá elegir la técnica más adecuada para expulsarlo.
  • Elije el objetivo al que vas a dirigir tu técnica. El objetivo debe ser una parte sensible o vulnerable del agresor, como los ojos, la nariz, el mentón, la garganta, los genitales, las rodillas, etc.
  • Ejecuta la técnica con precisión y fuerza. No falles ni te contengas en tu acción. El golpe debe ser efectivo y contundente.
  • Aprovecha el efecto de la técnica para alejar al agresor o para escapar o contraatacar si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de técnicas para expulsar al agresor

A continuación te muestro algunos ejemplos de técnicas para expulsar al agresor si entra en tu distancia de seguridad:

Tipo Técnica Objetivo
Empujar Empujar con las palmas de las manos al pecho del agresor. Hacerle retroceder o caer al suelo.
Golpear Golpear con el puño cerrado al mentón del agresor. Hacerle sangrar, romperle la mandíbula o dejarle inconsciente.
Pellizcar Pellizcar con los dedos la oreja del agresor. Hacerle soltar un arma, un agarre o una prenda.
Presionar Presionar con el dedo pulgar el ojo del agresor. Hacerle sentir un dolor intenso o una sensación desagradable.

Si después de los pasos anteriores el agresor persiste, patada sorpresa a su rodilla y huida al punto de refugio visto antes

Si has seguido todos los pasos anteriores y el agresor sigue amenazándote o atacándote, debes usar una técnica de defensa personal que le cause un daño grave o definitivo, y que te permita escapar al punto de refugio que habías identificado antes. Una de las técnicas más efectivas y sencillas es la patada sorpresa a la rodilla. Consiste en dar una patada rápida y fuerte a la rodilla del agresor, con el objetivo de romperle el ligamento o el hueso. Esta técnica puede dejar al agresor incapacitado o inmovilizado, y darte una ventaja para huir.

Cómo dar una patada sorpresa a la rodilla

Para dar una patada sorpresa a la rodilla debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su posición, su movimiento, su arma, su intención, etc. Esto te permitirá elegir el momento y el ángulo más adecuados para dar la patada.
  • Elije la rodilla a la que vas a dirigir tu patada. La rodilla debe ser la más cercana o la más expuesta al agresor. Puede ser la derecha o la izquierda.
  • Ejecuta la patada con rapidez y fuerza. No avises ni telegrafíes tu acción. La patada debe ser sorpresiva e imparable.
  • Aprovecha el efecto de la patada para escapar al punto de refugio que habías identificado antes. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de cómo dar una patada sorpresa a la rodilla

A continuación te muestro algunos ejemplos de cómo dar una patada sorpresa a la rodilla según la posición del agresor:

Posición del agresor Tipo de patada Rodilla objetivo
El agresor está de frente, con las piernas separadas y los pies paralelos. Patada frontal con el empeine o con el talón. La rodilla más cercana o la más débil.
El agresor está de lado, con una pierna adelantada y otra retrasada. Patada lateral con el borde externo o interno del pie. La rodilla de la pierna adelantada o retrasada.
El agresor está de espaldas, con las piernas juntas o cruzadas. Patada trasera con el talón o con la planta del pie. La rodilla más cercana o la más expuesta.

Partes con las que golpeamos y técnicas de golpe; el codo, la cabeza, la rodilla

Cuando tienes que defenderte o atacar al agresor en una situación de defensa personal, puedes usar diferentes partes de tu cuerpo para golpearle y causarle daño. Algunas de las partes más efectivas y potentes son el codo, la cabeza y la rodilla. Estas partes tienen varias ventajas, como por ejemplo:

Repite el mantra: ¡rodillazo, cabezazo, codazo! Y el agresor se irá servido¡

  • Son duras y resistentes, por lo que pueden golpear sin lesionarse ni romperse.
  • Son rápidas y precisas, por lo que pueden golpear sin fallar ni perder tiempo.
  • Son sorpresivas e impredecibles, por lo que pueden golpear sin avisar ni ser bloqueadas.
  • Son versátiles y adaptables, por lo que pueden golpear en diferentes direcciones y ángulos.

Para usar estas partes debes conocer las técnicas de golpe adecuadas para cada una de ellas

Los puntos débiles del agresor; los ojos, la nariz, el mentón, la garganta, los genitales, las rodillas

Los puntos débiles del agresor son las partes de su cuerpo que son más sensibles o vulnerables al dolor o al daño. Si golpeas estos puntos con una técnica adecuada, puedes causarle al agresor una lesión grave o incapacitante, y darte una ventaja para escapar o contraatacar. Algunos de los puntos débiles más comunes y efectivos son:

  • Los ojos. Son muy sensibles a la luz, al polvo, al aire y al contacto. Si presionas, pinchas o golpeas los ojos del agresor, puedes hacerle llorar, sangrar, perder la visión o quedar ciego.
  • La nariz. Es muy frágil y está llena de terminaciones nerviosas. Si golpeas la nariz del agresor con el puño, la palma, el codo o la cabeza, puedes hacerle sangrar, romperle el hueso o el cartílago, o causarle un shock.
  • El mentón. Es el punto de apoyo de la mandíbula y está conectado con el cerebro. Si golpeas el mentón del agresor con el puño, la palma, el codo o la cabeza, puedes hacerle perder el equilibrio, romperle los dientes o la mandíbula, o dejarle inconsciente.
  • La garganta. Es el conducto por el que pasa el aire y el alimento. Si presionas, golpeas o estrangulas la garganta del agresor con los dedos, la mano, el codo o el antebrazo, puedes hacerle toser, ahogarse, asfixiarse o morir.
  • Los genitales. Son los órganos sexuales masculinos o femeninos. Si pellizcas, arañas, muerdes o golpeas los genitales del agresor con los dedos, la mano, la rodilla o el pie, puedes hacerle sentir un dolor intenso, una náusea, un vómito o una esterilidad.
  • Las rodillas. Son las articulaciones que unen los huesos de las piernas y permiten su movimiento. Si pateas, golpeas o torces las rodillas del agresor con el pie, la rodilla, el codo o la mano, puedes hacerle romper el ligamento, el menisco o el hueso, o quedar cojo.

Cómo identificar los puntos débiles del agresor

Para identificar los puntos débiles del agresor debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su posición, su movimiento, su arma, su intención, su forma de vestir, etc. Esto te permitirá elegir el punto débil más adecuado para atacar.
  • Elije el punto débil que sea más accesible o expuesto al agresor. No todos los puntos débiles están al mismo nivel ni al mismo alcance. Busca el que esté más cerca o más descubierto.
  • Elije el punto débil que sea más sensible o vulnerable al agresor. No todos los puntos débiles causan el mismo efecto ni el mismo daño. Busca el que le provoque más dolor o más lesión.

Cómo atacar los puntos débiles del agresor

Para atacar los puntos débiles del agresor debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en su posición, su movimiento, su arma, su intención, su forma de vestir, etc. Esto te permitirá elegir la técnica más adecuada para atacar.
  • Elije la técnica que se adapte mejor al punto débil que vas a atacar. La técnica debe ser rápida, precisa y contundente. Puede ser un golpe, una presión, un pellizco, etc.
  • Ejecuta la técnica con rapidez y fuerza. No avises ni telegrafíes tu acción. La técnica debe ser sorpresiva e imparable.
  • Aprovecha el efecto de la técnica para escapar o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Cuatro llaves de suelta de; manos, pecho, cuello y por detrás

Las llaves de suelta son las técnicas de defensa personal que te permiten liberarte de un agarre del agresor. Un agarre es cuando el agresor te sujeta con una o ambas manos alguna parte de tu cuerpo, como las manos, el pecho, el cuello o por detrás. Un agarre puede tener varios objetivos, como por ejemplo: impedir tu movimiento o tu defensa, acercarte o alejarte del agresor, causarte dolor o daño, intimidarte o dominarte, etc. Para liberarte de un agarre debes usar una llave de suelta adecuada a cada situación. Una llave de suelta consiste en usar una técnica de defensa personal que rompa el agarre del agresor y que te permita alejarte o contraatacar. Algunas de las llaves de suelta más efectivas y sencillas son:

Llave de suelta de manos

Esta llave te permite liberarte cuando el agresor te agarra una o ambas manos con una o ambas manos. Consiste en girar tu mano hacia el hueco que queda entre el pulgar y el índice del agresor, aprovechando la debilidad de su agarre. Esta llave tiene varias ventajas, como por ejemplo:

  • Es fácil y rápida de ejecutar, ya que solo requiere un movimiento simple y natural.
  • Es discreta y no provocativa, ya que no implica ningún golpe ni ninguna fuerza bruta.
  • Es versátil y adaptable, ya que se puede usar en diferentes posiciones y direcciones.
  • Es efectiva e indolora, ya que rompe el agarre del agresor sin causarle ningún daño ni ninguna reacción violenta.

Cómo ejecutar la llave de suelta de manos

Para ejecutar la llave de suelta de manos debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en cómo te agarra la mano. Puede ser con una mano o con dos, por encima o por debajo, por la muñeca o por los dedos, etc.
  • Elije la dirección hacia la que vas a girar tu mano. La dirección debe ser hacia el hueco que queda entre el pulgar y el índice del agresor. Puede ser hacia arriba o hacia abajo, hacia dentro o hacia fuera, según la posición del agarre.
  • Ejecuta el giro con rapidez y decisión. No avises ni telegrafíes tu acción. El giro debe ser sorpresivo e imparable.
  • Aprovecha el efecto del giro para soltar tu mano o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de manos

A continuación te muestro algunos ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de manos según el tipo de agarre:

Tipo de agarre Dirección del giro
El agresor te agarra la mano derecha con su mano derecha por encima. Gira tu mano hacia arriba y hacia fuera.
El agresor te agarra la mano izquierda con su mano izquierda por debajo. Gira tu mano hacia abajo y hacia dentro.
El agresor te agarra las dos manos con sus dos manos por las muñecas. Gira tus manos hacia arriba y hacia fuera.
El agresor te agarra los dedos con una mano y te tuerce la muñeca con la otra. Gira tu mano hacia abajo y hacia dentro.

Llave de suelta de pecho

Esta llave te permite liberarte cuando el agresor te agarra el pecho con una o ambas manos. Consiste en golpear el codo del agresor con tu mano, aprovechando la debilidad de su articulación. Esta llave tiene varias ventajas, como por ejemplo:

  • Es fácil y rápida de ejecutar, ya que solo requiere un movimiento corto y directo.
  • Es discreta y no provocativa, ya que no implica ningún golpe a la cara ni ninguna fuerza bruta.
  • Es versátil y adaptable, ya que se puede usar en diferentes posiciones y direcciones.
  • Es efectiva e indolora, ya que rompe el agarre del agresor sin causarle ningún daño ni ninguna reacción violenta.

Cómo ejecutar la llave de suelta de pecho

Para ejecutar la llave de suelta de pecho debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en cómo te agarra el pecho. Puede ser con una mano o con dos, por encima o por debajo, por el centro o por los lados, etc.
  • Elije el codo al que vas a golpear con tu mano. El codo debe ser el más cercano o el más expuesto al agresor. Puede ser el derecho o el izquierdo.
  • Ejecuta el golpe con rapidez y fuerza. No avises ni telegrafíes tu acción. El golpe debe ser sorpresivo e imparable.
  • Aprovecha el efecto del golpe para soltar tu pecho o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de pecho

A continuación te muestro algunos ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de pecho según el tipo de agarre:

Tipo de agarre Codo objetivo
El agresor te agarra el pecho derecho con su mano derecha por encima. Golpea su codo derecho con tu mano izquierda por el lado externo.
El agresor te agarra el pecho izquierdo con su mano izquierda por debajo. Golpea su codo izquierdo con tu mano derecha por el lado interno.
El agresor te agarra los dos pechos con sus dos manos por el centro. Golpea sus dos codos con tus dos manos por los lados externos.
El agresor te agarra el pecho por los lados con sus dos manos y te aprieta. Golpea sus dos codos con tus dos manos por los lados internos.

Llave de suelta de cuello

Esta llave te permite liberarte cuando el agresor te agarra el cuello con una o ambas manos. Consiste en golpear la mano del agresor con tu mano, aprovechando la debilidad de su agarre. Esta llave tiene varias ventajas, como por ejemplo:

  • Es fácil y rápida de ejecutar, ya que solo requiere un movimiento corto y directo.
  • Es discreta y no provocativa, ya que no implica ningún golpe a la cara ni ninguna fuerza bruta.
  • Es versátil y adaptable, ya que se puede usar en diferentes posiciones y direcciones.
  • Es efectiva e indolora, ya que rompe el agarre del agresor sin causarle ningún daño ni ninguna reacción violenta.

Cómo ejecutar la llave de suelta de cuello

Para ejecutar la llave de suelta de cuello debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en cómo te agarra el cuello. Puede ser con una mano o con dos, por delante o por detrás, por la garganta o por la nuca, etc.
  • Elije la mano a la que vas a golpear con tu mano. La mano debe ser la más cercana o la más expuesta al agresor. Puede ser la derecha o la izquierda.
  • Ejecuta el golpe con rapidez y fuerza. No avises ni telegrafíes tu acción. El golpe debe ser sorpresivo e imparable.
  • Aprovecha el efecto del golpe para soltar tu cuello o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de cuello

A continuación te muestro algunos ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta de cuello según el tipo de agarre:

Tipo de agarre Mano objetivo
El agresor te agarra el cuello con su mano derecha por delante y te aprieta la garganta. Golpea su mano derecha con tu mano izquierda por el lado externo.
El agresor te agarra el cuello con su mano izquierda por detrás y te tira hacia atrás. Golpea su mano izquierda con tu mano derecha por el lado interno.
El agresor te agarra el cuello con sus dos manos por delante y te aprieta la garganta. Golpea sus dos manos con tus dos manos por los lados externos.
El agresor te agarra el cuello con sus dos manos por detrás y te tira hacia atrás. Golpea sus dos manos con tus dos manos por los lados internos.

Llave de suelta por detrás

Esta llave te permite liberarte cuando el agresor te agarra por detrás con una o ambas manos. Consiste en golpear el pie del agresor con tu pie, aprovechando la debilidad de su equilibrio. Esta llave tiene varias ventajas, como por ejemplo:

  • Es fácil y rápida de ejecutar, ya que solo requiere un movimiento corto y directo.
  • Es discreta y no provocativa, ya que no implica ningún golpe a la cara ni ninguna fuerza bruta.
  • Es versátil y adaptable, ya que se puede usar en diferentes posiciones y direcciones.
  • Es efectiva e indolora, ya que rompe el agarre del agresor sin causarle ningún daño ni ninguna reacción violenta.

Cómo ejecutar la llave de suelta por detrás

Para ejecutar la llave de suelta por detrás debes seguir estos pasos:

  • Observa al agresor y fíjate en cómo te agarra por detrás. Puede ser con una mano o con dos, por la cintura o por los brazos, por el cuerpo o por la ropa, etc.
  • Elije el pie al que vas a golpear con tu pie. El pie debe ser el más cercano o el más expuesto al agresor. Puede ser el derecho o el izquierdo.
  • Ejecuta el golpe con rapidez y fuerza. No avises ni telegrafíes tu acción. El golpe debe ser sorpresivo e imparable.
  • Aprovecha el efecto del golpe para soltar tu cuerpo o para seguir atacando si es necesario. No te quedes paralizado ni esperes la reacción del agresor.

Ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta por detrás

A continuación te muestro algunos ejemplos de cómo ejecutar la llave de suelta por detrás según el tipo de agarre:

Tipo de agarre Pie objetivo
El agresor te agarra por detrás con su mano derecha por la cintura y te tira hacia atrás. Golpea su pie derecho con tu pie izquierdo por el lado externo.
El agresor te agarra por detrás con su mano izquierda por los brazos y te inmoviliza. Golpea su pie izquierdo con tu pie derecho por el lado interno.
El agresor te agarra por detrás con sus dos manos por el cuerpo y te aprieta. Golpea sus dos pies con tus dos pies por los lados externos.
El agresor te agarra los dos pechos con sus dos manos por el centro. Golpea sus dos codos con tus dos manos.
El agresor te agarra el pecho por los lados con una mano y te aprieta con la otra. Golpea el codo de la mano que te aprieta con tu mano libre.

Conclusión

En este artículo te he enseñado cómo defenderte de una agresión física, usando algunas técnicas de defensa personal. La defensa personal es el conjunto de habilidades y técnicas que te permiten protegerte de una amenaza física o verbal, usando tu cuerpo o algún objeto como arma. La defensa personal no es solo saber golpear o bloquear, sino también tener una actitud y una mentalidad adecuadas para afrontar el conflicto. Te he explicado cómo identificar y atacar los puntos débiles del agresor, cómo liberarte de diferentes tipos de agarres y cómo escapar de una situación peligrosa.

Espero que este artículo te haya sido útil e interesante, y que hayas aprendido algo nuevo sobre la defensa personal. Recuerda que la defensa personal no es solo una cuestión de fuerza o de violencia, sino también de inteligencia y de prevención. La mejor defensa es evitar el conflicto, pero si no es posible, debes estar preparado para defenderte y para proteger a los demás. La defensa personal es un derecho y una responsabilidad de todos.

Preguntas frecuentes

¿Qué es la defensa personal?

La defensa personal es el conjunto de habilidades y técnicas que te permiten protegerte de una amenaza física o verbal, usando tu cuerpo o algún objeto como arma.

¿Qué ventajas tiene aprender defensa personal?

Aprender defensa personal tiene muchas ventajas, como por ejemplo: aumentar tu confianza y tu autoestima, mejorar tu condición física y mental, desarrollar tu capacidad de reacción y de decisión, prevenir o reducir la violencia, y defender tus derechos y los de los demás.

¿Qué tipos de técnicas de defensa personal existen?

Existen muchos tipos de técnicas de defensa personal, según el objetivo, el nivel y el estilo que se quiera practicar. Algunos ejemplos son: golpes, bloqueos, llaves, proyecciones, luxaciones, inmovilizaciones, estrangulamientos, pellizcos, arañazos, mordiscos, etc.

¿Qué partes del cuerpo se pueden usar para golpear al agresor?

Se pueden usar diferentes partes del cuerpo para golpear al agresor y causarle daño. Algunas de las partes más efectivas y potentes son el codo, la cabeza y la rodilla. Estas partes son duras y resistentes, rápidas y precisas, sorpresivas e impredecibles, versátiles y adaptables.

CÓMO EVITAR LAS PICADURAS DE MOSQUITOS

Recopilación de consejos de Internet para que no nos piquen los mosquitos, nos piquen poco o cuando nos piquen, qué debemos de hacer para aliviar el picor.

Diez consejos para evitar las picaduras de mosquitos

Una serie de acciones pueden permitirte evitar en gran medida la picadura de los mosquitos:

  • 1. Zonas prohibidas.
    Mejor evita las áreas donde los insectos acuden o tienen sus nidos. Por ejemplo, cubos de basura, balsas con agua, comidas y dulces sin tapar y jardines en flor. Así mismo, hay que procurar no molestar a los insectos.
  • 2. Pendiente del reloj.
    Es preferible que no salgas, en la medida de lo posible, entre el anochecer y el amanecer, ya que es el momento en el que los mosquitos pican habitualmente.
  • 3. Atención a los olores.
    No utilices colonias que desprendan olores dulces ni jabones con perfumes o aerosoles para el pelo, ya que atraen a los insectos.
  • 4. Cuidado personal diario.
    Mantener una correcta higiene corporal te ayudará, porque también la sudoración y los olores fuertes, como el de los pies, invitan a los mosquitos a picar.
  • 5. Mejor tapado.
    Es conveniente usar ropa que cubra la piel, como manga larga, pantalones largos y calcetines, así como evitar los colores oscuros y brillantes, que atraen a los mosquitos. Así mismo, es importante sacudir la ropa antes de usarla si la has tendido en exterior.
  • 6. Luces fuera.
    Si tienes la ventana de la habitación abierta, procura dejar la luz apagada, ya que los mosquitos acuden a ella.
  • 7. El aire ayuda.
    El aire acondicionado impide la aparición de los mosquitos. También puedes colocar ventiladores dentro de casa para alejarlos. Así mismo, ayuda mantener ventilada la habitación donde vayas a dormir.
  • 8. Emplea mosquiteras.
    Puedes ponerlas en la cama o cuna fijándolas bajo el colchón y asegurándote de que no estén rotas, porque constituyen una barrera física de alta eficacia contra los insectos que atacan por la noche. También puedes colocarlas en ventanas y puertas y, para mejorar la protección, puedes impregnarlas con permetrina o deltametrina.
  • 9. Uso adecuado de los repelentes.
    Debes utilizar los repelentes de mosquitos respetando estrictamente las recomendaciones sobre el modo de aplicación y la frecuencia de empleo.
  • 10. Consulta a tu farmacéutico.
    Él te asesorará acerca del tratamiento más adecuado para ti. Además, si vas a visitar un país en desarrollo en el que los mosquitos puedan ser transmisores de enfermedades, es recomendable acudir a un centro especializado en medicina del viajero o consultar con un médico antes de partir.

Fuente: https://cinfasalud.cinfa.com/p/mosquitos/

¿Qué es bueno para eliminar los mosquitos?

Algunos de los aceites esenciales más efectivos contra los mosquitos son el de eucalipto, limón, lavanda, almendras, citronela, romero o geranio.

  • El aceite de lavanda sirve como repelente de los mosquitos. …
  • La manzanilla no solo es un digestivo. …
  • Clavos pinchados en limones. …
  • Dientes de ajo pelados en un bol.

Remedios naturales contra mosquitos.

Utilizar velas aromáticas, aceites esenciales, ajo o algunas plantas son algunos de esos remedios para evitar a los dichosos mosquitos.

  1. Limón y clavo.
  2. Velas, incienso y aceites.
  3. Mosquitera.
  4. Plantar macetas de albahaca o alfábega.
  5. Vinagre.
  6. Trampa anti-mosquitos.
  7. Bolsas de plástico transparentes.
  8. Aceite de eucalipto.
  9. Manzanilla.
  10. Repelente de almendras.
  11. Aprende a hacer repelente de mosquitos con plantas del huerto.
  12. Repelente casero con menta y clavo.
  13. Aceite de hierba de gato.
  14. Naranja y clavo.

Existen muchos tipos de soluciones para ahuyentar a los mosquitos, algunos más efectivos que otros.

En primer lugar, está el uso de productos químicos, como los insecticidas o repelentes. Estos productos son muy eficaces, pero solo de manera temporal, además, tienen la desventaja de ser caros y muy nocivos para el medio ambiente y para las personas y los animales domésticos. También está el uso de mosquiteros, pero estos suelen ser muy incómodos.

Luego están los trucos caseros, los cuales son baratos y eficaces.

Si quieres ahuyentar los molestos zancudos de tu habitación, pon en práctica las siguientes recomendaciones:

1- Cuelga bolsas llenas de agua en las puertas y ventanas. Eso hará que los mosquitos u otros insectos se vean reflejados de manera deforme y crean ver a un posible depredador.

2- El olor del vinagre molesta a los mosquitos. Si colocas recipientes con agua y esa sustancia en las ventanas estos no entrarán.

3- Coloca trampas caseras para mosquitos. Para fabricarlas corta una botella de plástico casi por la mitad. La parte pequeña quedará como un embudo. En la parte del fondo de la botella (que será la más grande) coloca agua tibia, dos cucharadas de levadura y cinco cucharadas de azúcar morena. No las mezcles. La mitad donde quedó la boquilla sin tapón introdúcela en la parte donde están los ingredientes. Envuelve ambas partes con un plástico o cartón negro; solo quedará despejada la entrada de la trampa. Los mosquitos entrarán y ya no podrán salir.

Trampa mosquitos

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4- Usa repelente natural de hierbas. Mezcla 25 gotas de aceite de menta, 15 gotas de esencia de clavo, 5 gotas de esencia de limón y 2 cucharaditas de jabón desengrasante. Ponte esa mezcla en el cuerpo.

5- Coloca en puertas y ventanas plantas aromáticas como romero, geranio mosquitero, citronela, eucaliptos, tomillo y albahaca.

También puedes utilizar velas con aceites repelentes que se queman produciendo un humo basado en las sustancias que contienen esas plantas.

6- En Perú es conocido que las personas que han comido huevos, les pican menos los mosquitos.

7- En Indonesia se comen la hoja de la papaya en sopa o a la plancha.

11 remedios caseros contra los mosquitos

  • Limón (o naranja) y clavo: Un excelente remedio que podrás poner en tu habitación para dormir con tranquilidad consiste en colocar un limón con varios clavos en la habitación donde duermas. Otro remedio consiste en naranja, clavo y una vela.
  • Fragancias en forma de velas, incienso y aceites: Especialmente efectivos en espacios exteriores como el jardín, la terraza o el patio, estas fragancias exentas de tóxicos pueden ayudarte a alejar el zumbido de los mosquitos a otra parte y evitar que accedan a tu hogar. Las fragancias más efectivas son la citronella, el limón, la lavanda, el eucalipto, el laurel, el romero y la albahaca.
  • Plantar especias, hierbas y flores: Plantar deliciosas especias como la albahaca, tan propia de la cultura mediterránea te ayudará no solo a completar el sabor de tus platos, sino también a repeler a los mosquitos debido a su aroma. No solamente la albahaca te ayudará, sino también tener una maceta con lavanda, tomillo, romero, hinojo, eneldo, crisantemo, narcisos, geranios o petunias también te ayudará a repeler a los mosquitos. Una de las más efectivas es la citronella.

Planta de Citronella

  • Vasito con vinagre: Cerca de las ventanas puedes poner un vaso cuyo interior contenga una mezcla de agua con una cuarta parte de vinagre blanco. ¡Y adiós mosquitos!
  • Trampa casera: Puedes cortar una botella por la mitad y preparar en su interior un remedio casero para mosquitos consistente en agua con azúcar previamente calentada. Cuando esté fría, espolvorea levadura sobre el preparado y deja la parte superior de botella dada la vuelta en forma de embudo.
  • Bolsa transparente con agua: Desde páginas especializadas como Ecoinventos recomiendan rellenar de agua bolsas transparentes y colgarlas de las ventanas o situarlas cerca de las mismas para mantener alejadas tanto a las moscas como a los mosquitos.
  • Aceite esencial de eucalipto: Puedes prepararlo en casa solamente con cocer en agua hirviendo un puñado de hojas de eucalipto. A continuación, unas veinte gotas bastan para ahuyentar a los mosquitos, pero, además, puedes mezclarlo con tu crema hidratante o de protección solar habitual para añadirlo a tu piel y repeler a los bichos desde cualquier parte. Puedes mezclar con los aceites de tomillo, poleo, albahaca y limón para reforzar los beneficios.
  • Flores de manzanilla con agua: Debes lavarla bien y aplicarla directamente sobre la piel cada par de horas.
  • Repelente de almendras: Para preparar este remedio casero solamente debes mezclar cien mililitros de aceite de almendras, veinte gotas de esencia de geranio y veinte gotas de esencia de albahaca. Se trata de un truco especialmente aconsejable para niños y bebés porque resulta muy suave y efectivo.
  • Mezcla de menta y clavo: Combinando 25 gotas de aceite esencial de menta con 15 gotas de aceite esencial de clavo, 5 gotas de aceite de esencial de cítricos y 2 cucharaditas de jabón desengrasante obtendrás un fantástico aceite para tu piel que repelerá a todos los mosquitos que se aproximen a ti.
  • Spray de ajo: Coloca en un recipiente un poco de agua y algunos dientes de ajo cortados. Deja macerar unas horas y vierte en un spray. Pulveriza en toda la casa, sobre todo, en cortinas y vértices de puertas y ventanas. Cabe destacar que el azufre del ajo repele los mosquitos, las moscas, las garrapatas y las pulgas.
  • BONUS: Hablando de repelentes, puedes mezclar con tu loción habitual cualquier aceite esencial de las plantas citadas anteriormente. Añadiendo a tu crema hidratante lavanda, citronela o hinojo obtendrás fantásticos resultados y tendrás tu propio remedio casero contra los mosquitos. 

Para prevenir la aparición de mosquitos, debes evitar dejar vasos o botellas abiertas y emplear durante los meses de verano productos cosméticos demasiado perfumados, así como prendas de colores muy vivos. Es recomendable comer alimentos con mucha vitamina B como las lentejas, las almendras y los champiñones, así como productos ricos en vitamina C como los cítricos. Si ya es demasiado tarde, puedes emplear té verde, aloe vera o pepino para calmar las picaduras.

Fuente | Ecoinventos/Mejor con salud/Plantas y Remedios

Una vez que nos han picado:

Uno de los pequeños inconvenientes del verano es la presencia de mosquitos, que aumentan su actividad con las temperaturas altas. Capaces de adentrarse en nuestro hogar por casi cualquier resquicio, pueden hacer que nuestro descanso sea imposible. Y es que, los mosquitos aumentan su voracidad al atardecer, con lo que a veces, dormir resulta complicado cuando nos rodean estos diminutos seres voladores.

En muchas especies, son las hembras de mosquito las que perforan nuestra piel, succionan nuestra sangre y nos inyectan un anticoagulante y otras substancias que nos causan la inflamación y el picor habitual. Los mosquitos hembra necesitan nuestra sangre para la puesta de huevos.

Una vez conocido el proceso os acercamos unos cuantos consejos para aliviar los efectos de las picaduras.

Aplica frío en la zona

Una persona se moja el brazo con agua fría. ShutterStock
Lavar con agua fría

Si te acaba de picar un mosquito y no tienes ninguna alternativa mejor a mano, puedes acercarte al grifo más cercano y aplicarte agua fría en la zona afectada. También podemos aplicar hielo para que se reduzca la inflamación, teniendo cuidado de no quemarnos, por lo que es aconsejable evitar el contacto prolongado del hielo con la piel.

Utiliza amoniaco

Los bolígrafos de amoniaco, que modifican el pH de la piel, pueden ser un buen remedio contra el picor que nos genera una picadura. A pesar de que puede no disminuir la inflamación o el dolor posterior, si se actúa pronto podremos acabar con la molestia del picor, puesto que el pH básico del amoniaco neutraliza el veneno del mosquito, que es ácido.

El aloe vera es una gran opción

El aloe vera es un buen remedio para acabar con el picor que provoca la picadura de un mosquito. ShutterStock
Aloe vera

El aloe vera es un buen remedio para acabar con el picor que provoca la picadura de un mosquito. ShutterStock

Utilizada como remedio para diferentes heridas a lo largo de la historia, el aloe vera también es un gran recurso para hacer frente a la picadura de un mosquito. El gel refrescante y antiinflamatorio que poseen las hojas de esta planta es de gran ayuda si lo aplicamos sobre la zona. Con expandir el gel de esta planta y dejarlo secar sobre la herida ya actuaría. También podría utilizarse cremas compuestas de aloe vera.

Bicarbonato de sodio y agua

Esta pasta puede ayudar a neutralizar el pH de la piel tras la picadura. Para ello, hay que aplicar la pasta y dejarla reposar durante algunos minutos. Después podemos lavar la picadura y retirar este ungüento.

Utiliza tomillo para aliviar el molesto picor

Las propiedades antibacterianas del tomillo pueden ayudarnos a aliviar el dolor de la picadura y además, contribuir a que no se nos infecte si hemos cometido el error de rascarnos. Podemos triturar las hojas de esta planta y aplicarlas directamente en la herida y dejarlas durante unos diez minutos.

Albahaca para antes y después de que nos piquen

Las hojas de albahaca, además de ahuyentar a los mosquitos, puede paliar el picor de sus picaduras. ShutterStock
Albahaca

Las hojas de albahaca, además de ahuyentar a los mosquitos, puede paliar el picor de sus picaduras. ShutterStock

Los elementos que componen las hojas de estas plantas, resultan eficaces tanto para aliviar el picor de la picadura como para ahuyentar a los insectos. Tendremos que poner a hervir un recipiente de agua y añadir las hojas secas de esta planta. Después, dejaremos que se enfríe y aplicaremos un paño húmedo con este líquido sobre la picadura. También podemos utilizar una hoja de albahaca directamente sobre la herida.

Fuente: https://www.levante-emv.com/vida-y-estilo/salud/2019/07/05/seis-remedios-caseros-aliviar-picaduras/1897507.html

La Higiene en Supervicencia

1. La higiene como incentivador de moral

Las personas que no siguen una serie de hábitos de higiene y salud no son bien consideradas por el resto del colectivo. Sin embargo, en supervivencia puede parecer un tema menor y sin importancia debido a la urgencia de mantenerse con vida.

En la Escuela Española de Supervivencia consideramos como base de la supervivencia: conocimiento, habilidades y fortalezas; el mantenimiento de la vida propia en un estado de salud óptimo es el fiel reflejo de la fortaleza, o de la voluntad de sobrevivir.

2. La higiene por salud

2.1. Higiene en el entorno / refugio

La supervivencia puede darse en todos los entornos, incluso estando en un edificio encerrados o sepultados, y es necesario mantener la higiene en todos los casos.

Es importante evitar zonas con animales muertos y excrementos, especialmente de ave. Estas zonas pueden exponerte a enfermedades como a la Histoplasmosis … Si estamos obligados a quedarnos allí: Rociar con agua las superficies, Usar mascarilla de respiración.

Si estamos en un área confinada tener en cuenta: El CO es muy venenoso, para detectarlo es necesario tener animales cerca, cuanto más pequeños mejor, por ejemplo, un ratón o un pájaro, ante un síntoma de atolondramiento del animal habrá que salir inmediatamente; Si el O2 es menor del 21% una llama disminuye; Aumento de concentración de CO2: Aumento de la frecuencia respiratoria; Concentraciones de metano: Si tenemos llamas, estas cambian de color; Una corriente de aire no tiene por qué ser de aire fresco o respirable; Necesitamos ventilar con aire que sabemos seguro.

2.1.1.1. Contaminación química o biológica

Los agentes biológicos que se podrían usar son: Patógenos: Su entrada al cuerpo es por heridas, respiración, comida… y toxinas que aparecen inmediatamente tras la exposición y penetran desde la piel, incluso sin heridas.

Protección ante agentes biológicos: Usa la mascarilla o máscara de gas si no tienes nada cubre la cara con un paño húmedo. Ponte guantes, abrocha todo y mete el pantalón por dentro de los calcetines y sal lo antes posible. Una vez lejos debes asearte por completo con agua y jabón: ropa, equipo, dientes, pelo, uñas…

2.1.1.2. Contaminación radiactiva

Cuando sospechemos que existe contaminación radioactiva lo más apropiado es alejarse del foco de contaminación. En caso de exposición, se recomienda destruir la ropa y objetos que se llevaran encima. Por otro lado, ante una exposición a la radiación beber vino tinto, método empleado por marineros de embarcaciones con armas radioactivas, puede ayudarte un poco en caso de exposiciones leves.

2.1.1.3. Riesgos microbiológicos y enfermedades contagiosas

Puede verse envuelto en una situación de supervivencia en algún lugar debido a una epidemia, sobre todo en países poco desarrollados, pero también puede ocurrir que al realizar un acto de supervivencia grupal por otra causa haya un riesgo sanitario por el hecho de tener menos medicamentos, menos higiene y más contacto humano (o contacto con animales).

Medidas de intervención, sobre la fuente de infección

  • Animal: Diagnóstico, tratamiento, aislamiento, sacrificio (incluyendo desinsectación y desratización)
  • Telúrico: control del medio ambiente y desinfección.
  • Personas: Diagnóstico, tratamiento, cuarentena/aislamiento (dependerán del tiempo de transmisibilidad de la enfermedad, de las vías de eliminación de microorganismos y de las características del medio ambiente).

Medidas sobre el mecanismo de transmisión

  • Contacto directo: Educación sanitaria (uso de mascarillas, preservativos, normas higiénicas…).
  • Contacto físico entre personas, transmisión por gotitas (partículas >5 μm, que se mantienen poco tiempo en el aire), Transmisión por aire (partículas <5 μm, son capaces de estar bastante tiempo en el aire). En estos casos los consejos que debemos seguir son los siguientes, dependiendo de la forma de contagio por contacto:
  • Cubrirse la boca y nariz al toser o estornudar con la zona interior de la unión del brazo – antebrazo y realizar higiene de manos después.
  • En caso de usar pañuelos, utilizarlos desechables y tirarlos a la basura después.
  • Las personas infectadas deberán llevar mascarilla e intentar mantener una distancia mínima de 1 metro con otras personas en áreas comunes.
  • Lavarse las manos, lavar las tablas de cortar, las superficies de apoyo, los cuchillos y otros utensilios después de que hayan tenido contacto con alimentos crudos.
  • Lavar bien los vegetales y las frutas antes de comerlos.
  • Cocinar bien la carne. Los jugos deben ser transparentes y el interior no debe estar rosado.
  • No comer huevos crudos ni mal cocidos.
  • Evitar consumir leche u otros productos lácteos (quesos) crudos o no pasteurizados.
  • Cubrir mobiliario con ropa lavable, retirándola con cuidado y sin agitarla.
  • Limpiar suelos y superficies mínimo dos veces al día, prestando especial atención en zonas expuestas con mayor frecuencia al contacto de manos como picaportes, interruptores, mandos, teléfono…)
  •  En caso de compartir el baño, limpiarlo antes de cada uso.
  • Prestar especial atención a la higiene personal.
  • Evitar el contacto con enfermos y los objetos de su entorno.
  • Mantener una distancia superior de 1 metro con las personas que puedan estar o estén infectadas.
  • Trata de no saludar con besos o dando la mano
  • No te toques los ojos, la boca o la nariz con las manos (los patógenos pueden sobrevivir en determinadas superficies desde unas horas hasta varios días).
  • No son necesarios sistemas especiales de ventilación o manejo del aire. Se recomienda la ventilación de los espacios cerrados.
  • Los enfermos deberán utilizar mascarilla para minimizar el contagio.
  • Contacto indirecto (objetos intermediarios, por inmersión en aguas contaminadas, …): higiene de manos, uso adecuado de barreras (guantes, mascarilla…), desinfección y/o esterilización de instrumentos, control de aguas de consumo, recreativas y residuales, medidas de higiene, limpieza y desinfección de superficies y control alimentario.
  • Vectores: desinsectación, desratización, control de residuos.

2.2. Higiene personal

2.2.1. Prevención: anterior a la supervivencia

Desgraciadamente, la mayoría de nosotros no nos sometemos a un chequeo médico regular. Muchas personas creen que solo hay que ir al médico o dentista si algo va mal. Visite al médico y al dentista y tenga suficiente material de limpieza y protección.

2.2.2. Higiene durante la supervivencia

Cabello: No es necesario utilizar champú; Ojos: Aclararlos con agua dos veces al día; Dientes y encías: En situación de supervivencia frotarse los dientes y las encías con un dedo limpio, o bien preparar una pasta de dientes con bicarbonato o un enjuague bucal con agua y sal; Cuerpo: Lávese cada dos días las axilas, la entrepierna, las manos y los pies con agua limpia para mantener a raya las infecciones por hongos. Uñas: Tanto las de las manos como las de los pies, deben permanecer limpias y cortas.; Manos: Es de especial importancia la limpieza de manos.

CÓMO LAVARSE LAS MANOS

  • Utilizar agua tibia.
  • Añadir jabón sobre las palmas de las manos y frotar durante 15 segundos, realizando fricción mecánica en las palmas, dorso, espacios interdigitales y antebrazos.
  • Retirar el jabón debajo del grifo.
  • Utilizar, si es posible, una toalla de papel desechable.
  • Usar toallitas húmedas con alcohol o gel desinfectante cuando no se disponga de agua y jabón. Si se usa gel, frotar las manos hasta que el gel se seque. El gel no necesita agua para hacer efecto.

3. Productos de higiene y limpieza

Productos imprescindibles: Papel higiénico, Jabón en pastillas, Lejía, Bicarbonato sódico, Gel y champú, Alcohol etílico de 96 grados, Sosa caustica, Cepillos de dientes, Pasta de dientes, Seda o hilo dental, Colutorio, Detergente en polvo, Talco, cuchillas de afeitar, Espuma de afeitar, Tijeras normales y de manicura, Cortauñas, Guantes, Estropajo, Peine, Espejo, Crema labial, Vaselina, Tratamiento antipiojos, Compresas, Tampones, Toallas húmedas aptas para usar en los retretes.

3.1. Fórmulas y creación de artefactos para la higiene

  • Lejía: Con una proporción de 1:3 de ceniza y agua. Se lleva a ebullición y después dejándolo reposar de 12 a 24 horas antes de decantar la solución clara del agua de lejía. Por último, filtrar la lejía para quitar los elementos más pesados. Una solución si no se puede hervir el agua, aunque dará una lejía menos potente, sería mantener la solución con agua caliente (expuesta al sol), en un día tendremos una solución de lejía.
  • Colutorio: Podemos hacer infusiones de Hinojo y menta para hacer enjuagues bucales y dejar nuestra boca más fresca. Si tenemos bicarbonato es una de las opciones para el blanqueamiento de los mismos dientes.Otra opción es usar agua de mar. Debido a la alta salinidad del agua del mar, un enjuague de agua de mar es excelente para eliminar bacterias en la boca.
  • Jabón: El jabón líquido de camping es un concentrado antibacteriano que se puede utilizar sin agua.

Se puede elaborar jabón de distintas maneras:

  • Sosa caustica y agua. Proporciones: 25% partes de agua limpia (mejor si es destilada), 65%  de grasa y 10 % de sosa.
    • Lejía y Grasa/aceite: Combina un litro de lejía con medio litro de aceite. Lleva el producto a fuego lento y déjalo hervir hasta que espese. Agrega el jugo de limón y retíralo del fuego cuando adquiera una contextura de jabón. Vértelo en moldes y úsalo para las tareas de limpieza del hogar.
    • Saponaria: Agitar unas raíces de saponaria en agua hasta formar espuma.
  • Dentífrico o pasta de dientes:
    • Mezcla un 50% de sal y 50% de bicarbonato sódico. Si no tienes sal, con el bicarbonato será suficiente.
    • El aceite de coco virgen extra tiene la capacidad de prevenir y combatir las bacterias que se acumulan en la boca y los dientes, además de reducir la inflamación de las encías.
  • Papel higiénico:

Desde la antigüedad se ha utilizado muchas cosas: lechuga, trapos, pieles, césped, conchas marinas, algas, hojas de coco o de maíz, guías telefónicas.

  • Detergente de lavadora casero: Usaremos una pastilla de jabón (como el que hemos aprendido a fabricar), le añadiremos un vaso de bicarbonato sódico, una pizca de sal y luego un litro y medio de agua hirviendo. Removemos bien y podemos añadir algún aceite aromático. Una vez frío se puede usar en la lavadora.
  • Detergente para fregar suelos: Combinación de agua y vinagre o agua y lejía.
  • Cepillo de dientes. Una rama de madera blanda como el abedul deshilachado en un extremo.
  • Escoba: Un palo largo al que ataremos ramas muy finas. También se puede hacer escobas cortando en tiras muy finas una botella de plástico de refrescos. La boca de la botella sirve para engarzar el palo.
  • Fregona: Atamos tiras de tela a un palo.
  • Esponja: Podemos entrelazar tiras finas de tela hasta hacer una malla tupida. Si las telas son suaves con esta esponja podremos frotarnos también el cuerpo.
  • Mascarilla: Con una tela fina que haga de filtro de aire y con cordino o elástico para no tener que sujetar la tela con la mano. Empapar la mascarilla con agua o mejor vinagre hará más efectivo que el paso de aire sea más limpio.
  • Máscara de gas: El procedimiento de creación será tener un cuerpo para la visera y protección de boca, ojos y nariz fijado a la cabeza por un elástico o cordino (este cuerpo bien pudiera ser parte de una botella de refresco transparente de 2 litros, por ejemplo). Añadiremos a este cuerpo los filtros.

Los filtros de la máscara de gas es lo más importante, se componen de: algodón, carbón (que filtra el aire de muchos químicos y toxinas) y en muchos casos se suele usar cal sodada. Es importante poner varias capas de material y que el primero y último sean de algodón (para que la cal y el carbón se mantengan en el filtro y no lo inhalemos). En el caso de existir CO en el ambiente habrá que añadir óxido de cobre o óxido de manganeso.

Como ya sabemos el carbón se puede fabricar con una combustión de madera con poco oxígeno, por ejemplo, tapando con tierra la madera ardiendo. Por otro lado, la cal sodada la podemos fabricar con cal viva y sosa caustica, mezclando la sosa con el agua al 50%, se mezcla con la cal haciendo una pasta y se calienta hasta que se vuelve sólido. Después solo queda pulverizarlo.

La cal viva solo la podremos conseguir quemando la roca caliza a 900º, evidentemente necesitamos un horno que alcance esa temperatura. Para hacer sosa caustica puedes tomar la alternativa y fabricar lejía casera con ceniza y agua.

Con efectos de cerrar la creación de este artefacto, y ya que se ha mencionado el óxido de cobre (aunque es muy específico su uso), este material podremos obtenerlo calentando carbonato de cobre hasta que se vuelva negro y dejándolo reposar. El carbonato de cobre está en todo lo que sea cobre y esté a la intemperie y tiene un color verdoso.

Artículo redactado por Antonio Manuel González, instructor de la EES&B

Trampas en Supervivencia

Indicaciones antes de empezar
  

En la EES&B respetamos la naturaleza y ni somos partidarios ni nos gustan las trampas, pero por ser una herramienta para proveer alimentos en una situación extrema, las enseñamos. Su uso en España (consultar cada país) está absolutamente prohibido en todas las épocas y lugares. Sólo las enseñamos a efectos de formación y sólo sería justificable (pero no legal) su uso en caso de extrema necesidad.

         No a las trampas

Proveernos de alimentos en modo supervivencia es una de las necesidades básicas y aunque no es la prioritaria, sí es muy importante.

La alimentación con animales sigue unas reglas muy simples:

  1. Es más fácil pescar que cazar, si tienes opciones toma la primera.

2. Los animales más «asequibles» son los reptiles, tomas tus precauciones y serán presas fáciles. Y en éste caso ni siquiera tienes que colocar trampas, te buscas un palo largo para levantar piedras y troncos (nunca con las manos) y seguro encuentras algunos, ! o ellos a tí ¡, ! ten cuidado ¡

3. Antes de poner ninguna trampa hay que hacer una labor de rastreo para saber qué animales hay, las sendas de paso, los abrevaderos, las zonas de descanso, etc. Cada trampa es ideal para un tipo de animal, antes de empezar a colocar tenemos que saber cuál es el objetivo y el tipo de trampa, que definimos seguidamente.

4. Si has detestado en el rastreo previo otras presas, lo mejor es poner trampas, y muchas, porque mientras ellas están colocadas, tú puedes hacer otras tareas.

5. Revísalas cada día.

Tipos de trampas

Hay dos tipos de trampas fundamentales que se definen por el lugar de colocación; de paso o con cebo. Las primeras se colocan en sendas de animales, las segundas se pueden colocar en otros lugares pues el cebo atraerá a la presa.

Otra diferencia es si queremos la presa viva o muerta, lo que influirá en el diseño del sistema de atrapamiento. Para atrapar la pieza viva, montaremos redes o canastas de atrapamiento, y si la deseamos muerta, montaremos; picas, lazos o sistemas de aplastamiento.

Otra decisión a tomar es si la pieza la atrapamos a nivel de suelo o se eleva. Esa decisión viene dada porque si por ejemplo, vamos a atrapar conejos y hemos detectado en el rastreo previo que hay zorros, lo más normal es que cuando lleguemos, el zorro se haya comido al conejo atrapado. Por eso montamos sistemas de presas con elevación.

También será decisorio el tipo de animal al cual va dirigida lo que influirá en su estructura general, fortaleza, lugar de colocación y otros factores. 

Cada trampa es útil para un tipo de presa y en un ambiente determinado, la elección dependerá de esos factores y por supuesto de la pericia del trampero para construirla.

Estructura de una trampa

  • Estructura o soporte
  • Gatillo o disparador
  • Resorte o sistema de energía
  • Sistema de atrapamiento

Todas las trampas comparten cuatro mecanismos esenciales con algunas variaciones, son:

                        Estructura o soporte; el sistema que mantiene firme la trampa unida al suelo u a otra fijación y que le da forma y consistencia para soportarla tanto a ella como a la fuerza que tendrá que soportar de la presa atrapada.

                        Gatillo o disparador, es el sistema artesanal que con poca energía o movimiento hará saltar la energía acumulada en el “resorte” para accionar al sistema de “atrapamiento o de muerte”.

Ejemplos de gatillos
Gatillo

                        Resorte o sistema de energía, denominamos así al medio por el que se transmite la energía necesaria para que el sistema funcione; en caso de las trampas con lazo es la misma tensión producida por la presa al intentar escapar, en el caso de las trampas con pica, la energía puede proceder de una rama verde doblada (energía elástica Ee), una piedra suspendida en el aire (energía potencial Ep), o la misma energía de la gravedad al caer una presa en un foso con estacas (Energía potencial Ep).

                        Sistema de atrapamiento, que puede ser por; lazo, foso, aplastamiento, atrapamiento en caja, apuñalamiento, … En definitiva, es el sistema que o por muerte o por medios físicos impide que la presa escape.                     

Descarga de póster sobre trampas, para imprimir en A2

accesorios

Aclarando conceptos de; supervivencia, bushcraft, survivalismo, prepper.

Aclaración sobre los términos de; supervivencia, bushcraft, supervivencialismo o survivalismo, preparacionistas o preper.

Supervivencia se busca aprender a sobrellevar una situación de emergencia en un tiempo relativamente corto. Es un conjunto de conocimientos, habilidades y fortalezas cuyo objetivo es mantener y preservar la vida ante una situación extrema. El conjunto de conocimientos que comprende la supervivencia está especialmente enfocado en las primeras 72 horas pues es el tiempo en que el que, en gran medida, se define la resolución positiva o negativa del evento luctuoso que la ha provocado. Cuando se ha estabilizado la situación y la supervivencia empieza prolongarse en el tiempo, se aplican técnicas, procesos y tareas que requieren un amplio conocimiento de habilidades y oficios relacionados con el campo, denominamos a éstas materia de “supervivencia a medio plazo (SMP)” o en su término en inglés “bushcraft (BH)”. Por lo tanto, en SMP y en BH realizamos las mismas tareas, pero en la primera es para mantener la vida y sobrevivir hasta salir de esa situación en el BH es un estilo de vida elegido.

El bushcraft es una forma de vida elegida, es un estilo de vida y en su conjunto son «habilidades en asuntos relativos a la vida en el monte». Sus técnicas son similares a las aplicadas en supervivencia a medio plazo, pero el fin que se desea es otro, sus fines buscar una forma de vida utilizando los recursos del entorno, quienes los practican desarrollan, por ejemplo:

• Capacidades para construir una casa para un uso prolongado.

• Conocer y aplicar en la alimentación plantas, raíces, hongos y tubérculos comestibles.

• Habilidades para realizar la propia ropa y calzado.

• Habilidades en madera

• Crianza de animales.

• Caza, pesca y rastreo de animales.

• Agricultura.

• Alfarería.

El supervivencialismosurvivalismo (este último del inglés survivalist, también llamados preppers o preparacionistas, y por tanto se puede llamar preparacionismo) es el nombre que recibe el movimiento de individuos o grupos que se preparan activamente para sobrevivir una posible futura alteración del orden político o social, ya sea a nivel local, regional, nacional o internacional. El término survivalismo se desaconseja por no usar la raíz en español supervivencia sino la inglesa survival.

Los supervivencialistas prevén situaciones de desastres, faltas de recursos, colapsos de la sociedad, epidemias, etc y se preparan en; formación, abastecimientos y refugios para esos posibles escenarios. Practican el autoabastecimiento y la defensa propia construyendo edificios y refugios que les ayuden a sobrevivir en cada caso.

Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Supervivencialismo